Creo que el reto no es "sacar más discos en equis tiempo". El reto considero es permanecer juntos. Con tantas bandas hoy en día, es más difícil destacarte, y destacarte requiere de mucho, y muchas bandas no sobreviven a eso y cambian constantemente su alineación después de lograr destacar un poco.

Claro, siempre el reto principal será sacar un álbum bueno, uno de esos que no te canses de escuchar. Pero hay bandas que lo logran, y se separan. O pierden algunos miembros. Creo yo que una banda deja de ser esa banda cuando pierden a más de un miembro. No sé si me explico,  pero respeto más a una banda que en equis número de años sacó solo un disco, pero permanecen juntos y activos; a una banda que en el mismo número de años sacó varios discos, y en el proceso perdieron a varios integrantes.
No lo digo en afán de ofender/molestar a fans de cualquier banda, y mucho menos a las bandas mismas.
Solo es mi opinión.

Una banda cuando saca buena música y permanece junta, se gana mi admiración.

Parece que no te das cuenta.
¿Están ciegos?

Solo tengo esa pregunta. ¿Estás ciega, o finges serlo?
Parece que no te percatas de como cada palabra es como una puñalada, directa al corazón.
¿autoestima?
Eso no existe desde que decidiste ser la destructora de mi burbuja.
"Baja de peso"
"Cada día estas más gorda"
"¿así quieres estar para la boda?"
Cada palabra duele, duele cada vez más. Las pronuncias a diario, incluso a veces no necesitas decirlas. Lo leo en tu mirada.

Yo tengo que fingir ser sorda, tengo que fingir que esas palabras no se quedan clavadas como molestas astillas. Hago como que la autoestima que intento reconstruir a diario, no siente tus palabras y sigue aumentando un milimetro cada día.
Pero la verdad es que cada noche que me convenzo a mi misma "Soy bonita, carajo. Claro que necesito trabajar en mi, pero soy de valor." Y al día siguiente, el minuto en que decides dar esa mirada de reprobación, o decides dar tu comentario, duele tanto que hago un esfuerzo por no llorar.

¿No te basta con recordarme lo mediocre que soy?
No. Necesitas destruir la casi nula autoestima que hay en mi, pero no puedo decir nada, ¿cierto?
No puedo si quiera darte una mirada de odio, porque en automático soy la mala del cuento.

No puedo odiarte, claro que no. No es lo correcto.
No puedo reclamarte. Nada. No puedo decirte lo fatal que me haces sentir.
¿Quieres saber porque me odio? Trata de ver todo lo que has hecho los últimos años, y te darás cuenta.
¿Quieres saber porque soy tan reservada? Abre los ojos y mira lo que me haz hecho.

Abre los ojos y mira todo lo que soy por tu culpa.

Se acabó el año.

Imagínate.

Las energías se consumen, se desvanecen.
El cuerpo afloja, la conciencia descansa.
No estás muerto, pero tampoco estás vivo.

Desconoces la realidad, ya no existe simplemente.
 

Olvidas escuchar y ver lo que está frente a ti.
Olvidas lo que es existir, solo eres un fantasma andante.
Para ti el resto no vive, tú estás atrapado en tu irrealidad.
En tu mundo no existen todos los demás, solo tú y tus sueños felices.

No hay tristeza.
No hay ira.
Es simplemente perfecto, ¿no?

Lástima que, solo es tu imaginación.

and I must be crazy, just for looking at you.

Me gustaría decir que hay alguna sonrisa que me derrite. Una mirada que me hace soñar.
Me gustaría decir que hay un rostro que al verlo me provoca cosquillas en el estómago.
Me gustaría decir que, al coincidir con su mirada, el resto del mundo deja de existir.
Me gustaría decir que por una probada de su boca, pagaría millones.


Pero no es así. No hoy, mañana seguramente tampoco.
Es que esto de no pensar en nadie, es agradable.
Me gustaría decir que quiero sentir algo por alguien, y que me sea correspondido. Pero ya lo intenté demasiado. Ya me rendí. Lo que tenga que venir, que venga. Pero yo ya no buscaré, y ciertamente, no sentiré.

And don't you ever feel alone?

Día a día tu sonrisa invade mi cerebro.
Tu fina y rosada boca, cínica, traviesa.
Tu mirada profunda, esos ojos de un curioso color.
No eres real.

Tu recuerdo me provoca un escalofrio.
Tu aterciopelada voz, me serena.
Tu falta de moral, me provoca.
No existes.

Las ideas extravagantes que logras introducir en mi cabeza.
Las heridas que sugieres que provoque.
Solo estás en mi mente, no tienes cuerpo.

Si fueras real, me voy contigo.
Pero no lo eres.
Si te pudiera tocar, estoy segura que tu tacto sería frio, casi intolerable.
Pero no puedo.
No existes.
Eres solo una jugarreta de mi mente.

Cada vez que me acuerdo que soy yo la que tiene el control, me divierto riéndome de ti, así como tu te diviertes alejando a mis seres amados. Hiriéndolos y mofándote de ellos.

¿Quien diría que los demonios internos pueden tomar una forma tan apuesta?